Akrapovič para BMW Z4 y Toyota Supra

El 6 cilindros en línea biturbo que equipa el nuevo BMW Z4 M40i y el Toyota GR Supra es una maravilla de motor de 340 CV, pero la sobrealimentación es algo más discreto de lo que espera uno de estos deportivos. Akrapovič, que libera la voz de estos deportivos gracias a una línea trasera e intermedia en titanio, propone ahora además un down-pipe para poder completar la línea de escape y obtener así más potencia y par motor junto con el típico y aclamado sonido Akrapovič.

El down-pipe Akrapovič para BMW Z4 (G29) y Toyota Supra (A90) de nueva generación es de acero inoxidable de alta calidad. El complemento ideal para el escape Slip-On y los intermedios Evolution Line en titanio de Akrapovič. Una vez instalado en nuestro coche, gozaremos de una línea completa de escape Akrapovič, desde los colectores hasta las colas de escape.

El interés de este down-pipe es el incremento de potencia y par que proporciona. Un down-pipe es la pieza que conecta los colectores de escape (que recogen y canalizan todos los gases del motor hacia el resto del sistema de escape) y el catalizador, que convierte los gases nocivos del motor en sustancias bastante menos nocivas. Casi siempre incluye el catalizador. El tubo de los down-pipes suele estar diseñado expresamente con un gran diámetro para que los gases del motor puedan viajar rápidamente a través del sistema de escape sin ninguna restricción.

Así, es un elemento esencial en cada coche. Sin embargo, el catalizador de serie -muy denso- puede reducir ligeramente el rendimiento del motor, ya que reduce notablemente la velocidad del flujo de los gases. Es una medida conservadora por parte del fabricante del coche que desea asegurarse unos niveles de emisiones legales, independientemente del uso que se vaya a hacer a posteriori del coche.

 

Down-pipe sí, pero con catalizador deportivo

Con un catalizador deportivo, como el que equipa el down-pipe de Akrapovič, los gases fluyen más deprisa al mismo tiempo que sigue cumpliendo su función de transformar gases nocivos en emisiones menos contaminantes.

Además, por su amplio diámetro, produce un sonido mejorado y deportivo, recordando el de un coche de competición con una respuesta fantástica a altas revoluciones, sin zumbido ni vibraciones no deseados, lo que lo hace adecuado para el uso diario. Al instalar el down-pipe de Akrapovič, es obligatorio reprogramar la ECU del coche para evitar posibles señales de errores. Y es que la ECU de BMW y Toyota interpretaría de forma errónea la lectura que harían los sensores de oxígeno que van dentro del down-pipe debido al catalizador deportivo.

 

Texto: Daniel Murias